Es un chico de 21 años. Tiene un tipo raro, pues aunque tiene unos brazos musculosos, le sobran unos cuantos kilos de más. Su tez bastante oscura va acorde con su cabello y sus ojos marrones. Esos ojos marrones que de vez en cuando se aclaran y se asemejan a la miel, siempre van acompañados de unas gafas redondas que hacen juego con su ovalo de cara.
Laya lo conoció a través de Dani. Con el paso del tiempo aprendió muchas cosas de Julio y supo apreciarlo de una manera un tanto peculiar. Con el transcursos del tiempo unos inconvenientes marcaron sus destinos, tal vez fuera la aparición de una persona.
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